Planta lo que comas
Hace muchos años vivía en un piso súper pequeño con una terraza en la que daba mucho el sol, así que un día decidí que no tenía sentido no aprovechar esas horas de sol para algo.
Ahí fue cuando empecé a comprar única y exclusivamente orgánico y ecológico después de investigar casos de Monsanto u otras empresas que no se preocupan especialmente de nuestra nutrición y le quitan las semillas a nuestros alimentos…
La cuestión era que tomé la decisión de plantar todas las semillas de los alimentos reales que me comía, para entender como funcionaba la naturaleza y empezar a cosechar mis propios alimentos sin pesticidas. Es una práctica muy gratificante; comer alimentos que sabes de donde proceden y que tú misma has hecho crecer con mucho cariño, cuidado y mimos.
El primer paso es germinar las semillas y más adelante, según la temporada de cada alimento, lo plantamos en una maceta 🙂